
Luego de ser presentado el Tour de Francia 2015, el turno le corresponderá a la tercera de las Grandes Vueltas de ruta del mundo, la Vuelta a España, cuya acto protocolario para conocer el recorrido de la próxima edición (la 70) fue confirmada para el 10 de enero en el magno Auditorio Municipal Príncipe de Asturias de Torremolinos, Málaga, confirmaron este jueves la Diputación de Málaga y Unipublic, la entidad que tiene a cargo su organización. Se disputará del 22 de agosto al 13 de septiembre.
Entre tanto, el director de la competencia, Javier Guillén, ratificó que comenzará en la Costa del Sol, justo por los alrededores de la zona en la que se presentará, con los tres (o cuatro) primeros días por allí, pero sin dar detalles de las ciudades a las que llegará, cruzará o de las que saldrá. De acuerdo al dirigente, la elección se hizo por un motivo contundente: «La Vuelta cumple 80 años de existencia», por lo tanto, «los ciclistas necesitan un escenario bonito y aquí se va a mezclar el azul del mar, con el verde de los paisajes».
En 2006, fue el más reciente año que la Ronda Ibérica partió exactamente desde Málaga con una contrarreloj por equipos allí, siguió hacia Córdoba, donde abandonó territorio andaluz rumbo a Almendralejo. Finalizó en Madrid con el inédito y único triunfo, hasta ahora, de un kazajo, Alexander Vinokourov, hoy por hoy, entrenador del equipo Pro Tour Astana. Ahora se dice que Marbella, Estepona, Torremolinos y, desde luego, Málaga, son las ciudades candidatas a dar el pistoletazo inicial también con un ejercicio colectivo, como en la reciente edición en Jerez de la Frontera que dominó el anfitrión Movistar.
Es claro que la capital (Madrid) volverá a ser el escenario final de la carrera española, en el famoso Paseo de La Castellana, tras haber concluido el pasado 14 de septiembre en Santiago de Compostela, algo que no ocurría desde 1993. La capital de Galicia quiso de esa manera, celebrar el octavo centenario de la peregrinación de San Francisco de Asís a esta población del noroccidente español cuyo sector antiguo es Patrimonio de la Humanidad desde 1985, y la Vuelta fue el marco deportivo ideal para este festejo religioso en un país eminentemente católico.
Guillén recalcó «los 80 años y las 70 ediciones» que cumplirá la Vuelta a España en la próxima temporada, la cual «tiene perfilado el 95 por ciento de su recorrido. Queremos que uno de los elementos transversales sea que nuestros 80 años de tradición combinen con un 80 aniversario de innovación. Queremos incluir muchos finales en alto inéditos. Quizá podamos anunciar que todos los finales en alto de la Vuelta serán inéditos, aunque no está todavía cerrado».
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