El jefe de filas del BORA – Hansgrohe, Daniel Felipe Martínez, tuvo un buen desempeño en la segunda contrarreloj de la edición 107 del Giro de Italia, en la que ocupó el puesto 14° a 1:45 del gran ganador: el italiano Filippo Ganna.

“Fue una CRI muy dura. Ahora estoy tercero en la clasificación general, pero en esta especialidad y en este tipo de recorridos Geraint (Thomas) normalmente tiene un muy buen desempeño”, dijo Martínez al final de la contrarreloj individual.

El colombiano perdió el segundo lugar de la general con Geraint Thomas, quien cruzó la meta de cuarto del día, lo que hizo que Martínez cayera al tercer puesto, ahora a 15 segundos del británico.

“Teniendo en cuenta lo que paso en la crono, diría que el balance del día es bueno. Lo di todo en la crono y la parte más dura y lo mejor de este Giro todavía está por venir”, agregó el escarabajo.

Cabe resaltar que las etapas montañosas más duras de la corsa rosa empiezan este domingo y siguen en la tercera semana, lo que puede favorecer a los escaladores colombianos. “Lo importante es que lo di todo y ahora queda lo más duro del Giro”, concluyó Martínez que sigue en el podio.

El Team Medellín-EPM ya se encuentra en Estados Unidos para afrontar su octava competencia del año, el Gran Premio Ciudad de Nueva York, un nuevo reto para el equipo continental colombiano.

Se trata de una carrera UCI 1.2 que se disputará este domingo 19 de mayo y en la que participarán más de 100 corredores de 17 equipos por los paisajes espectaculares de la ‘Gran Manzana’.

La escuadra antioqueña dirigida por José Julián Velásquez tendrá al español Óscar Sevilla y a los colombianos Wilmar Paredes, Javier Jamaica, Róbigzon Oyola, Brayan Sánchez y Víctor Ocampo.

En este formato revolucionario para el ciclismo profesional, 100 ciclistas de 17 equipos se alinearán 15 minutos antes que los 5.000 aficionados de la carrera recreativa en el nivel inferior del puente más transitado del mundo, el George Washington Bridge.

Ambas carreras seguirán el recorrido del GFNY en un circuito de 136,3 kilómetros (85 millas) a través del condado de Bergen, Nueva Jersey y el condado de Rockland, Nueva York, con 2000 metros de desnivel.

Entre los equipos participantes se encuentra el Alpecin Deceuninck de la categoría World Tour, además de los ProTeam Lotto Dstny, el Corratec Vini Fantini y el Bardiani CSF Faizanè, entre otros conjuntos continentales.

La continuación de la historia escrita por el ciclismo colombiano hace 10 años en el Giro de Italia nos indica que luego de las tres primeras etapas destinadas a los velocistas, la carrera siguió dentro de la misma tónica con victoria para el embalador francés Nacer Bouhanni en la cuarta jornada y el australiano Michael Matthews manteniéndose como líder.

El italiano Diego Ulissi obtuvo para su equipo (Lampre) y su país la primera victoria parcial en Viggiani mientras comienza a aparecer el ciclismo colombiano con Rigoberto Urán (Quick Step) como cuarto en la general, siguiendo así el derrotero de la prueba hasta la octava etapa ya con la montaña como adversario, lo que no impidió la segunda victoria de Ulissi en la octava etapa y el liderato del australiano Cadel Evans (BMC) y ahora el segundo lugar en la general para el de Urrao a 57 segundos.

La novena fracción ganada por Pieter Weening (Orica) y el día de descanso transcurrieron sin novedades, pero la “Corsa Rosa” se reinició con la tercera victoria de Bouhanni en la décima fracción y ese día se pudo ver la entrada en acción del futuro campeón Nairo Quintana (Movistar) quien se ubicó en el top 10 de la general instalándose en el noveno puesto a 1.45 de Evans.

Evans vs Urán en la contrarreloj

La carrera italiana entraba de esta manera en su segunda mitad con la disputa de la etapa 11 ganada por Michael Rogers (Tinkoff), mientras Cadel Evans siguió conservando su camiseta rosada con Urán a 57 segundos, Majka a 1:10, Pozzovivo 1;20, Aru 1;39 y Quintana (octavo a 1:45), clasificación general previa al gran crono individual de 42 kilómetros en Barolo que cambiaría completamente el panorama de la prueba.

En efecto, de manera brillante e incontestable, Rigoberto Urán consiguió aquel día un triunfo memorable, con ventajas de 1:17 sobre Ulissi y 1:34 sobre Evans, actuación que le valió también el liderato que por primera vez alcanzaba un ciclista colombiano, pasando entonces a comandar con diferencia de 37 segundos y 1:52 a su favor sobre Evans y Majka mientras Quintana despareció del top diez de manera temporal.

La victoria de etapa y el liderato de Rigoberto Urán fueron el campanazo inicial de lo que sería la segunda mitad de la gran carrera italiana para el ciclismo colombiano que a partir de ese día emprendió una fantástica campaña individual y colectiva con la que pasaría a la historia del Giro de Italia con letras de oro.