Son 25 escuadras y 200 corredores que representan lo mejor del ciclismo mundial -con honrosas excepciones-, como la de Alberto Contador, Chris Froome, Bradley Wiggins , Alejandro Valverde que no están presentes. Serán 298 kilómetros y prácticamente siete horas de pedaleo en una de las batallas deportivas que año por año marcan el desarrollo del deporte más rudo del mundo: El ciclismo.

Milano-San Remo es un monumento al ciclismo con sus más de cien años de existencia. A ella confluyen los más redomados velocistas del lote mundial y algunos de los más reputados astros del ciclismo en lo que a carreras por etapas se refiere, todos con la ilusión de inscribir sus nombres en el álbum de oro de la “Corsa dei Fiori “(La carrera de las flores), como lo han hecho Coppi, Merckx, Saronni, Moser, en el caso de los reyes de la montaña o Kelly, Zabel y Freire en el caso de los monarcas de la velocidad.

Algunas veces, Milano San Remo partió con el nombre de un favorito indiscutible que casi siempre respondió con brazos en alto en señal de victoria. En otras oportunidades se presentó una sonora sorpresa (Marc Gómez)  ó como en los dos años pasados cuando los australianos Mathew Goss  y Simon Gerrans han sorprendió al mundo, a sus  rivales y a los observadores con sonoras victorias al embalaje.

Esta vez, la lista de favoritos parece reducirse a un solo nombre : Peter Sagan (Cannondale) el joven eslovaco que se ha convertido en la nueva maravilla del ciclismo no solo por sus victorias sino por su personalidad que le ha granjeado mucha admiración pero también la antipatía de varios de sus colegas que están dispuestos a cobrarle este domingo su osadía. Sagan es un corredor demasiado completo, capaz de sobresalir en todos los terrenos y en todas las circunstancias, siendo dueño de una frescura física y mental envidiables sin importar tiempos, distancias o condiciones. Cuenta con un impresionante equipo en el cual sobresalen Moreno Moser y Elia Viviani, con los cuales conforma un tridente temido y temible. Sagan apenas se acerca a los 24 años de edad.

En la lista de sus rivales se hace necesario mencionar por lo menos una docena de hombres, todos de enorme calidad y prestigio, eso sí, notando la ausencia de los grandes ruteros de las carreras por etapas: Alberto Contador, Cadel Evans, Andy Schleck, Damiano Cunego, Alejandro Valverde, ausentes por voluntad propia o porque sus planes incluyen más bien otros desafíos  como la Vuelta a Cataluña o la Coppi-Bartali antes del Giro y el Tour.

Después de Sagan,  se ubica un grupo de tremendos velocistas cuyo emblema es el considerado “hombre más rápido del mundo”: el inglés Mark Cavendish. CAV ya sabe lo que es ganar San Remo y no piensa desaprovechar la oportunidad de sumar otra edición a su envidiable hoja de vida, tratando de vengar su desfase en la versión 2012 y las derrotas que ha sufrido recientemente.

Sus grandes rivales serán en el caso de llegada masiva -además de Sagan-verdaderos colosos de la velocidad como el noruego Hushovd,  el alemán André Greipel, el belga Tom Boonen (nunca la ha ganado y este año es compañero de Cavendish), los italianos Alessandro Petacchi, Rinaldo Nocentini, Filippo Pozzato, Daniele Bennati, el norteamericano Tyler Farrar y los ya mencionados australianos Goss y Gerrans, además del español Joaquín Rojas, decidido a reemplazar a su inolvidable paisano Oscar Freire-ya retirado- en el palmares de la carrera con tres victorias.

En el apartado de los “clasicómanos” no se puede olvidar al belga Philippe Gilbert (BMC), actual campeón mundial, el suizo Fabián Cancellara (RadioSchack-Nissan), protagonista de primera línea y serio aspirante a campeón, mientras la raza de los ganadores  de las grandes pruebas por etapas estará representada por Vincenzo Nibali quien viene de ganar Tirreno Adriático- una de las últimas grandes de la ruta antes de la cita en Milano- y se convierte no solo en el mas peligroso de los rivales de Sagan sino en una de las máximas esperanzas de millones de italianos para ver a uno de los suyos victorioso en San Remo, cosa que no sucede hace ya buen tiempo. Otro nombre aquí para no olvidar, es del francés Sylvain Chavanel.

Colombia dice presente con Miguel Rubiano

El ciclismo colombiano sigue en la historia de la carrera, con la presencia de Miguel Rubiano (Androni), único representante esta vez luego de que el año pasado formara en la línea de partida el Team Colombia . Rubiano es hombre ávido de experiencias y con deseos inmensos de superación para la temporada que está iniciando y sigue la huella trazada con la primera  aparición en Milano, en el año de 1973, del inolvidable  ‘Cochise’ Rodríguez haciendo parte del equipo italiano Bianchi-Campagnolo.

Colectivamente será una carrera “tranquila“ en sus primeros 100 kilómetros (2 horas de carrera), donde la fuga del día no habrá de faltar pero luego, estas máquinas infernales de dar pedales se pondrán al trabajo con el fin de conducir a su “ganador designado” hasta el pié de la Cipressa o en el mejor de los casos hasta el punto donde comienza la última escalada del día, el mítico alto del Poggio, cuyos siete kilómetros han sido y seguirán siendo el escenario donde los artistas de la bicicleta ejecutan su mejor obra.

Seguramente son más los que integran esta lista. Es posible que gane uno que no está en los nombres anteriores, lo que hace parte del encanto y la fascinación del día más largo del año. Lo único cierto es que por espacio de siete horas, el mundo del ciclismo vive otra vez, este domingo 17 de Marzo después de cien años, una de sus aventuras más apasionantes.