En un final a pura velocidad, Davide Ballerini se llevó la victoria en la Coppa Bernocchi 2022. El pedalista italiano resultó ser el más rápido en el sprint de un grupo numeroso tras una entretenida edición corrida por los alrededores de Legnano.
El corredor del Quick-Step-Alpha Vinyl se llevó el triunfo por delante del neozelandés Corbin Strong (Israel-Premier Tech) y de su compatriota Stefano Oldani (Alpecin-Deceuninck), luego de superar los 190 kilómetros de recorrido.
La fuga del dia la animaron los españoles Jon Barrenetxea (Caja Rural-Seguros RGA) y Francisco Muñoz (Eolo-Kometa), el francés Alan Jousseaume (TotalEnergies) y el italiano Giulio Masotto (Team Corratec), pero pasando la mitad de la carrera fueron capturados por el grupo de favoritos.
En las primeros compases la carrera llevó un ritmo pausado, pero la tormenta llegó con 55 kilómetros para el final, con protagonismo del colombiano Einer Rubio (Movistar), quien se fue en uno de los tramos de la subida a Morazzone, en compañía de Julian Alaphilippe (Quick-Step-Alpha Vinyl), Andrea Bagioli (Quick-Step-Alpha Vinyl), Mikkel Honoré (Quick-Step-Alpha Vinyl), Marc Hirschi (UAE Team Emirates), Diego Ulissi (UAE Team Emirates), Matteo Trentin (UAE Team Emirates), Natnael Tesfatsion (Drone Hopper-Androni Giocattoli), Miguel Ángel López (Astana Qazaqstan), Ion Izagirre (Cofidis) y Romain Grégoire (Groupama-FDJ).
En el último tramo de la subida de Morazzone, parecía que llegábamos al pie del ascenso con este grupo, pero Rubio, Ulissi, Ilan Van Wilder y Jousseaume tenían otros planes. Estos cuatro corredores aprovecharon un momento de descuido en el grupo y rápidamente consiguieron una buena ventaja. Más adelante Alaphilippe estaba atacó una vez más.
A treinta kilómetros para la llegada, una nueva fusión parecía sólo cuestión de tiempo. Sin embargo, siete corredores hicieron todo lo posible para mantenerse fuera del alcance del pelotón. Alaphilippe, Van Wilder, Hirschi, Jhonatan Narváez, Alessandro Covi, Corbin Strong y Stefano Oldani no fueron atrapados fácilmente, pero su aventura llegó a su fin a diez kilómetros de la meta.
En el cierre, el Quick-Step-Alpha Vinyl decidió cambiar de planes y tomó la delantera. Mauri Vansevenant llevó la batuta en los últimos tres kilómetros. Este trabajo fue aprovechado por Ballerini, quien corrió de manera convincente hacia su segunda victoria de la temporada, sucediendo a su compañero de equipo Remco Evenepoel, campeón de la última edición.
