Uno de los eventos más esperados en el mundo del deporte en este período de pandemia es el Tour de Franciay para ello se aguarda con ansiedad el protocolo mediante el cual se espera llevar a cabo el tercer evento deportivo del planeta, programado del 29 de agosto al 20 de septiembre.
Muchos meses trabajando de la mano con el gobierno francés y las autoridades sanitarias y policiales, han permitido a los organizadores (ASO) establecer un protocolo que el director de la carrera Christian Prudhomme, ha dado a conocer, haciendo énfasis en que algunos detalles esta aún por ajustarse y se aplicarán de cuerdo a las circunstancias.
Dos Escenarios
Queda claro, de acuerdo a las palabras del director que el protocolo establecido para el Tour de Francia tiene dos escenarios definidos: Uno “suave” y otro rígido pero en conjunto tienen el mimo objetivo: blindar el lote de ciclistas y preservar el concepto “burbuja”.
En el primero se pretende imponer medidas menos restrictivas al público, mediante la aplicación de las medidas más necesarias, como uso del tapabocas y el distanciamiento, así como el respeto a las barreras establecidas entre la caravana y el público.
En el segundo, -más exigente- se mencionan ya aspectos mucho más relevantes tanto para participantes como para público y será puesto a prueba en el Dauphiné, auténtico banco de pruebas para el Tour (ya otras se ensayaron en Paris-Niza este año) y los dos podrían mezclarse según como evolucione la pandemia y la situación sanitaria al momento de comenzar la gran carrera.
Prudhomme declaró; “Nosotros hemos trabajado colocando el Tour en diversos escenarios, teniendo en cuenta varias hipótesis y estamos preparados para afrontar diversas circunstancias”.
El director de la carrera, dejó saber que serán las alcaldías y autoridades locales, en ciudades de salida, llegada y paso de la caravana, las encargadas de delimitar los espacios para un máximo de 5000 personas, cupo máximo vigente hoy y fijado por las autoridades francesas para este tipo de actividades.
Sin acceso a ciclistas y equipos
El púbico y los periodistas no tendrán acceso en salidas y llegadas de cada etapa al Parking Oficial y además al terminar cada etapa, los corredores no se verán rodeados de cámaras y solamente los acompañantes de los equipos tendrán acceso después de la meta a la calzada por donde llegan los ciclistas.
En cuanto a las etapas montañosas, se ha diseñado un plan de filtración que permitirá el acceso al público,solamente a pie o en bicicleta y si fuese necesario, agrega Prudhomme; “Tenemos la capacidad necesaria para impedir totalmente el acceso a publico, gracias a un dispositivo especialmente dispuesto con las fuerzas policiales”. Esta es una circunstancia que ya se puso en práctica anteriormente.
La ceremonia de premiación en el podio, en esta oportunidad no verá madrinas ni personajes haciendo entrega de las camisetas y los corredores aparecerán individualmente en la tarima cuando sean llamados, luciendo la camiseta que le corresponde, la que se ha puesto detrás del escenario entregada por uno de los auxiliares de su propio equipo.
La post-etapa también tiene dispuesto el traslado de los cicistas a los hoteles y en los transbordos haciendo uso de los buses de sus equipos, incluídos los largos viajes de los días 6 y 20 de septiembre, que no serán ni en avión, ni en tren como sucedió hasta el año pasado.
En los hoteles, el régimen será mucho más estricto: Un piso completo para cada equipo donde se alojen y salones aislados para la alimentación de cada uno de ellos.
La caravana publicitaria, uno de los grandes atractivos y espectáculos del Tour para el público, se verá reducida este año solo al 40% del total de vehículos y marcas presentes en relación con los años anteriores.
La totalidad del reglamento del Tour está aún por concretarse y publicarse, pero queda claro que en esta oportunidad la caravana del Tour de Francia 2020 viajará por espacio de tres semanas bajo el siguiente lema y concepto: CADA UNO CON SU BURBUJA.