Al término
de la etapa once de la Vuelta a España,
el colombiano Miguel Ángel López
aseguró que esta fracción no ha sido del todo tan tranquila como se ha visto,
pero que ha servido para recargar energías para lo que resta de carrera.
El corredor boyacense que sigue siendo tercero en la general, afirmó que esta etapa se ha podido sentir una tensa calma en el pelotón. “No fue un día tan tranquilo, después de dos días prácticamente de descanso, el pelotón toma fuerzas y otra vez amanece alegre, ha habido varias caídas, se cortó el pelotón varias veces, el típico terreno sube y baja que es desgastante aunque no parezca desde la tele”.
El líder
del equipo Astana, se mostró
complacido por la incursión de la Vuelta en territorio vasco. “Carretera estrecha
a derecha-izquierda, típico terreno de aquí del País Vasco, aquí todavía hay algo que es encantador para el ciclismo,
mucha emoción, hay mucha afición también, pero bien en general”.
“Sabemos que estamos aquí en un terreno
bastante exigente y pensar sobre todo el día a día y descansar y tomar fuerzas
donde se pueda”. Añadió López que
luego de cumplir con un buen ejercicio en la contrarreloj, se alista para la
segunda y tercera semana de competencia.
Miguel Ángel igualmente indicó que en esta jornada, nunca hubo gran
angustia en la persecución de la escapada. “Siempre se tenía bajo control todo. Jumbo venía trabajando en el
pelotón y el primer hombre de la general estaba a cerca de treinta minutos
entonces había bastante margen”.