El bicampeón del Tour de Francia, Jonas Vingegaard, conoció el ciclismo a través de su padre (constructor de instalaciones para cría de salmón) quien solía practicar unas dos veces por semana y llevaba entonces a su hijo a las salidas o llegadas de algunas etapas de la Vuelta de su País (Dinamarca), viajando desde su pueblo natal (Hillerslev) donde la máxima elevación no supera los 200 metros sobre el nivel del mar y donde los vientos son los compañeros del diario vivir.
Jonás, recuerda un perfil realizado por L´Equipe, comenzó su vida deportiva jugando fútbol cuando tenía diez años, pero lo dejó rápidamente pues era tan pequeño de estatura que difícilmente le pasaban el balón, por lo que prefirió la bicicleta hasta que un buen día su padre lo inscribió en una prueba organizada por el club del pueblo, consistente en correr la distancia más larga posible en un minuto, resultando ganador y unas semanas más tarde tomó la salida en otra competencia para juveniles, esta vez en línea, resultando también vencedor, lo que le valió una pequeña copa que guarda como un tesoro.
Fue un año después cuando Claus y Karina (sus padres) le regalaron su primera bicicleta de carreras y a los 17 comenzó a correr, pero sin resultados pues su principal enemigo por su poco peso y estatura resultaba ser el viento contra el cual tenía que luchar como un condenado, pero jamás se mostró derrotado ni pensando en abandonar.
Tímido por naturaleza, el joven ciclista se encontraba a gusto solamente en compañía de su familia y pasaba los fines semana corriendo con su hermana que comenzó a competir un año después valiéndose del carro-casa comprado por sus padres para acompañarlos y además para viajar de vacaciones a Francia en donde aprendió a amar el Tour ya que se entrenaba con un amigo que viajaba con ellosy seguía las instrucciones de su padre quien hizo un curso en la Federación Danesa de Ciclismo para orientar debidamente a su hijo en aspectos como el entrenamiento, nutrición, sicología, fisiología, etc., etc.
Fue así como apenas con 15 años, Jonás Vingegard se familiarizó cada año con el Galibier, Telegraph, Croix de Fer, Madeleine, Alpe de Huez, teniendo como centro de entrenamiento y vacaciones el Fabourg Saint Maurice, aprendiendo todos los pormenores del ciclismo.
La llegada al profesionalismo se produce a los 19 años, luego de ganar una carrera en su país , lo que le sirve para ser llamado en 2016 por el equipo Colo-Quick de Thisted, pero se fracturó una pierna en 2017 teniendo tan pocos resultados que le recomendaron también realizar un trabajo suplementario en una bodega del puerto de Halsthom, empacando filetes de toda clase de pescados para exportar, labor que desempeñó disciplinadamente de 6 a 12 de la mañana y luego se iba entrenar, alternando la bicicleta de ruta y la de contrarreloj.
Y fue precisamente en una concentración en Calpe (España) finalizando 2018, luego de obtener buenos resultados en el Tour del Avenir y otras carreras, donde el staff técnico del equipo Jumbo le solicita al DT del Colo Quick un ciclista y este envía los datos de Jonás, firmando entonces un contrato de 2 años 2019-2020, ingresando así a la máxima categoría del ciclismo mundial y progresando cada vez más, ganando 1 etapa en Polonia y ya en 2021 se impone en etapas del UAE, el Dauphiné, gana la Coppi -Bartali más dos etapas y queda como subcampeón del Tour de Francia para el año siguiente llevarse el premio mayor en la Grand Bouclé.
Este año, Vingegard ganó cuatro de las cinco carreras que disputó a lo largo de la temporada. A continuación la Revista Mundo Ciclístico hace un recuento de su gran performance en todo lo que disputó en este 2023.
Campeón del Tour de Francia (2.UWT) – Salió victorioso en la única contrarreloj