En un final espectacular a toda velocidad, Matteo Trentin (UAE Team Emirates) se impuso al sprint en la 54ª edición de la clásica belga de Le Samyn, prueba del calendario europeo disputada sobre un recorrido de 209 kilómetros entre Quaregnon y Dour.
El velocista italiano se llevó el triunfo en en los últimos metros con un tiempo de 4 horas, 40 minutos y 30 segundos, por delante del francés Hugo Hofstetter (Arkéa-Samsic) y del belga Dries De Bondt (Alpecin-Fenix), segundo y tercero respectivamente.
La fuga del día la protagonizaron Sam Welsford (DSM), Nickolas Zukowsky (Human Powered Health), Jente Boons (BEAT Cycling), Kasper Saver (Minerva), Sander Lemmens (Tarteletto-Isorex) y Samuel Leroux (Go Sport-Roubaix Lille Métropole).
En la mitad de la carrera, el pelotón aceleró y la ventaja de los seis fugados comenzó a reducirse de forma lenta pero segura. A 93 kilómetros de la meta, justo después de que el numeroso grupo hubiera completado los primeros adoquines, se produjo una caída, en el que Florian Vermeersch fue una de las víctimas.
En el primer paso por la meta, el grupo de cabeza aún tenía un minuto y medio de ventaja sobre el pelotón. A 58 kilómetros todo había terminado para los escapados Lemmens y Boons y solo quedaron cuatro en la punta. Con 14 km para el final todo se acababa para el resto de la fuga.
Más adelante, Stan Dewulf lanzó un ataque, pero sin éxito. En la subida al Côte de la Roquette Oliver Naesen lideró el pelotón y una vez en la cima tomó el relevo Matteo Trentin con ayuda de Victor Campenaerts.
Los cambios de ritmo en el pequeño ascenso provocó que el pelotón se rompiera y una veintena de corredores se despegó del pelotón. Entre los punteros se encontraban Merlier, Dewulf,Campenaerts y Trentin, pero al comienzo de la última vuelta el gran grupo de cabeza volvió a fusionarse.
Al ingresar a los últimos diez kilómetros, Szymon Sajnok y August Jensen terminaron en el suelo. Tim Merlier terminó en el borde y apenas puedo mantenerse erguido en una zanja. Debido a esa maniobra, el campeón defensor tuvo que perseguir con la ayuda de Edward Planckaert y se quedó sin opciones.
En el tramo final, Dewulf lo intentó de nuevo, pero lo controlaron. En el último 1000 metros Campenaerts aceleró y Dewulf se fue a su rueda. Al final, un sprint reducido definió la carrera, en el que Matteo Trentin fue el más fuerte.