Sam Bennett (Deceuninck Quick Step) consolidó su poderío en los sprint este jueves con victoria en la quinta etapa de ParísNiza que se diputó entre Vienne y Bollène sobre una distancia de 200 kilómetros. Primož Roglic (Jumbo Visma) sigue líder a pesar de sufrir caída.
Bennett respondió a los pronósticos y al sensacional trabajo del Deceuninck Quick Step que cumplió a cabalidad con lo previsto y llevó al irlandés en la mejor posición posible para que en los últimos metros con una voraz aceleración se llevara la victoria sobre Nacer Bouhanni (Arkéa Samsic) y Pascal Ackermann (BORA Hansgrohe) que poco pudieron hacer ante la implacable superioridad del más ganador en los sprint del principio de temporada.
Los corredores colombianos Sergio Henao (Qhubeka Assos) y Daniel Arroyave (EF Education Nippo) ingresaron a la meta dentro del grupo principal, con el mismo tiempo del vencedor. En la general el mejor ubicado es Henao que ocupa la casilla 21 a 1 minuto 44 segundos del liderato.
Los múltiples intentos por integrar la escapada del día fueron la constante a lo largo de esta jornada, entre ellos el más significativo fue el de los clasicomanos Oliver Naesen (Ag2R-Citroen), Philippe Gilbert (Lotto-Soudal), Yves Lampaert (Deceuninck-Quick Step), Dries De Dondt (Alpecin-Fenix), corredores que alcanzaron a marcar una pauta sobre el grupo y posteriormente fueron cazados.
Las alarmas en el Jumbo Visma se encendieron en los últimos veinte kilómetros, ante la caída que sufrió el líder de la prueba Primož Roglic junto a algunos de sus compañeros de equipo, entre ellos el más perjudicado sería Tony Martin que se vio obligado al abandono. Sin embargo, Roglic se logró reintegrar y mantiene su privilegiada posición.
La quinta jornada de esta prueba recorrerá 202 kilómetros entre Brignoles y Biot. Etapa de alta montaña en la que los corredores ascenderán cinco puertos de montaña; dos de tercera, dos de segunda y uno más de primera categoría, el último de ellos, ubicado a poco menos de cincuenta kilómetros de meta.