Colombia amaneció el día viernes 13 de agosto con la infausta noticia proveniente de Cali en torno al fallecimiento del Doctor Carlos Ardila Lulle, un gran colombiano, creador y presidente del conglomerado empresarial conocido en el país y en el mundo como Organización Ardila Lulle, que tiene origen en uno de los hombres que por mas de medio siglo de su valiosa existencia trabajó de manera incansable y eficiente en beneficio de su patria.
En vida, Carlos Ardila Lulle nacido en la ciudad de Bucaramanga y ciudadano de todo el país, fue un visionario emprendedor que dedicó su vida entera desde el emporio que poco a poco y puro pulso fue construyendo para dar empleo a miles de colombianos, con el único objetivo de propiciar el crecimiento y desarrollo de Colombia en todas las áreas donde su presencia se hizo necesaria.
Con su desaparición, Carlos Ardila Lulle deja un enorme vacío en todo el sector industrial y empresarial de nuestro país. Su nombre será recordado siempre porque estuvo, está y estará ligado a través de sus empresas al desarrollo del país, para lo cual siempre estuvo acompañado de un grupo de ejecutivos que tanto como él han querido y quieren lo mejor para nuestra sociedad.
Quienes hemos sido operarios bajo su gestión hoy no podemos menos que expresar nuestro sentimiento de tristeza y desolación ante la partida de un hombre que significó tanto para tantos. El deporte colombiano en general y el ciclismo en particular tendrán siempre una deuda de gratitud para con el doctor Carlos Ardila Lulle, porque a él y a sus empresas se debe una gran parte del desarrollo y evolución que hoy es posible mostrar con orgullo ante propios y extraños.
El deporte fue siempre uno de sus grandes amores y lo entendió como un camino para propender por el bienestar de la niñez y la juventud, por lo que jamás se negó a prestar el mas pequeño y el más grande de los apoyos para que el deporte tuviese espacio propio en su gestión empresarial.
El ciclismo en particular guardará eternamente gratitud hacia su nombre, sus empresas y sus ejecutivos por el definitivo apoyo y compañía que siempre le han brindado desde 1972, cuando apareció el primer equipo POSTOBON en las carreteras nacionales, hasta hoy con el patrocinio a equipos y ciclistas, eventos como el Clásico RCN y su realización ininterrumpida después de 60 años, hazañas como el Tour del Avenir en 1980 que partió en dos la historia del ciclismo colombiano, el patrocinio a los Campeonatos Mundiales de pista y ruta en 1995,así como el actual patrocinio a las Selecciones nacionales de todas las modalidades.
En las ejecutorias inolvidables y de incalculable beneficio para el país y para el ciclismo nacional, se recordarán siempre las invitaciones a competir en el Clásico RCN a los mejores equipos y ciclistas del mundo como Bernard Hinault, Laurent Fignon, Greg Lemond, Sean Kelly, Claudio Chiapucci, etc, así como a los mas encumbrados dirigentes de este deporte a nivel mundial.
Guardaremos siempre la imagen del emprendedor, pero también la del hombre generoso y magnánimo que siempre tuvo como único fin el beneficio del país que lo vio nacer y el de la sociedad a la que ha pertenecido, de los cuales se mostró siempre orgulloso a pesar de las dificultades que con su fortaleza se propuso superar.
Respetuosamente y con dolor extendemos hoy nuestro mensaje de condolencia y solidaridad a su familia encabezada por los doctores Carlos Julio y Antonio José Ardila, así como a todo el grupo de ejecutivos en las diferentes empresas que integran la Organización Empresarial Ardila Lulle.
Nos despedimos de un gran colombiano con el corazón lleno de tristeza y elevamos una oración por su eterno descanso. Paz en la tumba de Carlos Ardila Lulle.