Efraín Forero Triviño, el primer gran héroe del ciclismo colombiano y más conocido como “El Indomable Zipa”, se acerca a los 90 años de edad que cumplirá el próximo 4 de marzo, en medio de la admiración y respeto que merece en su condición de primer campeón de la Vuelta a Colombia que justo terminó un 17 de enero.
Esa misma historia sirve para enseñarnos que el pionero del ciclismo en nuestro país nació en Zipaquirá, curiosamente en la misma ciudad de donde es oriundo Egan Bernal, el primer colombiano en conquistar el título del Tour de Francia. El “Zipa” estuvo prácticamente condenado a vivir su vida en medio de bicicletas, ruedas y pedales pues a los 18 años ya ganaba su primera carrera, una “Doble a Colombia” saliendo desde Zipaquirá hasta el sitio donde se bifurca la vía que conduce de Bogotá y Chía, además de incipientes carreras como la Doble a Tunja y la Doble a Girardot en 1950, antes de partir para la Vuelta a Colombia.
Del mismo modo, Forero se consagró en el exterior antes que en su país, ganando la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos de Guatemala, en la prueba de la Persecución por Equipos derrotando a Cuba, cuando en Colombia aún no se había construido el primer velódromo.
Sin embargo, el puesto de honor que la historia tiene reservado para Efraín Forero lo ganó al convertirse en el primer campeón de la Vuelta a Colombia en 1951, de la que fue también organizador y para la que se prestó como “conejillo de indias” pedaleando previamente los trayectos Bogotá-Honda y Honda-Manizales acompañado por el carro de los dirigentes Donald Raskin, Guillermo Pignalosa y Eduardo “Chuleta” Bernal para demostrar que era viable realizar la gran aventura del ciclismo colombiano.
Al terminar la primera Vuelta a Colombia en Bogotá el 17 de enero luego de diez etapas y tres días de descanso con el triunfo inobjetable de Forero, siguió también una larga permanencia en el ciclismo activo, compitiendo por espacio de diez años en toda suerte de carreras tanto en el país como en el exterior, incluidas ocho vueltas a Colombia (un retiro en 1952 por accidente) mientras en el exterior también fue pionero corriendo en Francia en 1953 la Route de Francia y los Campeonatos Mundiales de Ruta en Lugano (Suiza).
Quedaron para el recuerdo interminables historias de vida como la de su madre conduciendo el vehículo acompañante en las primeras Vueltas a Colombia y su hermano Antonio con el que compartió equipo en una de ellas, así como las enseñanzas y experiencias transmitidas a por lo menos tres generaciones de hombres y mujeres ciclistas.
Pero no todo fueron satisfacciones para el gran campeón, una vez retirado como ciclista en 1962. Entonces sus años transcurrieron en medio de diversas actividades (agente de ventas de cerveza, conductor de camión y autobús) hasta que en 1972 volvió al ciclismo pero como entrenador del famoso equipo SINGER desintegrado en 1976, iniciando un peregrinaje que lo llevó a impartir sus enseñanzas en Boyacá, Nariño, y el equipo de MINOBRAS en 1981, para verlo también como pionero en el ciclismo femenino conduciendo en el incipiente movimiento de la época al equipo de Bogotá en 1982 y luego en 1987 el equipo de Postobón en el Tour de Francia Femenino.
Con sorprendente vitalidad física y mental, a sus 70 años, Efraín volvió en el año 2000 a Zipaquirá con el fin de dirigir las escuelas de ciclismo promovidas por la alcaldía y unos años después, finalmente su vida transcurre plácidamente en Bogotá donde recibe de vez en cuando unos cuantos amigos y periodistas interesados en sus recuerdos -los cuales conserva con una lucidez asombrosa- y asiste a los eventos en los cuales es invitado y honrado como se lo merece.
Resulta imposible resumir la vida de un personaje nacional como Efraín Forero, pero tal vez la frase escrita en “La Gran Historia del Ciclismo Colombiano (1951-2011» lo definen y reflejan a la perfección: “La clase indiscutible, el interés por lo desconocido, la búsqueda incesante de la aventura, el valor para vencer las dificultades de la naturaleza y de la vida. El orgullo de ser el primero, el pionero del ciclismo colombiano. Este es, ha sido y será Efraín Forero Triviño, el indomable Zipa.