Fernando Gaviria marcó su primera victoria de la temporada este lunes tras imponerse en el imperial sprint que cerró la segunda etapa. El de La Ceja echó mano de toda su clase mundial para llevarse una gran victoria frente al local Nicolás Naranjo y el italiano Marco Benfatto que le valió además la camiseta de líder de la ronda sanjuanina.
“Ayer teníamos bastantes piernas e intentamos todo lo posible pero no se nos dio. Es difícil luchar contra eso cuando las cosas no se dan. Ayer hablamos con todo el equipo, tuvimos una charla para ver lo que había pasado pero lo dejamos atrás. Hoy salimos con la motivación de buscar la etapa y la conseguimos” inició Gaviria.
“No quería celebrar antes de pasar la meta porque sabía que mis rivales venían muy cerca y yo había hecho un gasto grande entonces sabía que las piernas nos podían jugar una mala pasada al final”.
“Hubo una caída pasando por Pocito y Maxi (Richeze) quedó involucrado. Yo también quedé involucrado pero no me pasó absolutamente nada y pude conectar con el grupo y hacer el sprint. Creo que aproveché mucho las circunstancias de que Álvaro (Hodeg) también se había equivocado, que casi hay una caída, que hubo movimientos y todo eso me favoreció”.
“Tenía demasiadas ganas de ganar porque ayer había intentado hacerlo y después de la caída de ayer, volver a entrar al grupo y tener las fuerzas para hacer el sprint. Sabía que tenía piernas entonces quería ganar y buscar hacer todo lo que pudiera porque estoy en optimas condiciones”.
“Tuve ayer mucha bronca pero me duró mientras llegué al hotel. Hablé con Maxi (Richeze) y todos los compañeros y les pedí disculpas por las palabras que quizá les dije después de la meta porque me dio mucha rabia, no puedo negarlo y bueno todo quedó en ayer y ya hoy terminamos todos tranquilos».
“Sabemos que un escalador nato como (Tadej) Pogacar en nuestro equipo no va a arriesgar tanto como algunos escaladores arriesgan. Creo que hay que arriesgar mucho mas al sprint y por eso a veces vemos caídas tan grandes” puntualizó el antioqueño que abrió así palmarés 2020, año en el que apunta a brillar con toda la clase y la categoría que lo distinguieron como uno de los mejores velocistas del mundo en 2017 y 2018.