El cierre de la etapa trece del Tour de Francia no fue el esperado para Egan Bernal, que cedió segundos valiosos con sus principales contendores en la disputa por las posiciones de privilegio de la prueba que este fin de semana presenta nuevamente un escenario ampliamente montañoso.
El escalador del INEOS Grenadiers, que cedió en meta 38 segundos con Primoz Roglič y Tadej Pogačar reconoció la gran fortaleza de sus rivales. “El ritmo fue muy muy duro… perdí algo de tiempo. La verdad es que me sentí muy bien, pero los otros estuvieron más fuertes. Son cosas que hay que aceptar cuando los otros corredores están más fuertes que uno y ahora hay que intentar seguir dando lo mejor”.
Sin embargo, afirmó que los indicadores numéricos le arrojan óptimos resultados. “Si miro mis números, se encuentran entre los mejores que he hecho. Solo tengo que aceptar que los demás son mejores”.
El colombiano no pierde de vista su objetivo y reveló cual será su estrategia a seguir en las próximas jornadas. “Tengo que mirar día a día, mantenerme enfocado y distribuir bien mis esfuerzos. Tengo que tratar de mantener la cabeza en alto”.