Alucinante -por decir lo menos-, resulta la fabulosa marca impuesta para la clásica distancia de los 4 kilómetros persecución individual en pista, impuesta por el formidable especialista italiano Filippo Ganna, integrante del no menos formidable escuadrón británico Team INEOS.
La impresionante cifra cronométrica de 4:02.647 conseguida por Ganna (23 años de edad) en el velódromo de Minsk a una altura de 280 metros sobre el nivel del mar supera el registro de 4:05.423 logrado por el norteamericano Ashton Lambie en el velódromo de Cochabamba en Bolivia ubicado a 2.558 metros.
Con lo cual el italiano deja abierta una gran discusión sobre los efectos de la altura en este tipo de esfuerzos “cortos”, con el agravante de que el italiano batió la marca el mismo día en dos oportunidades pues en la serie de clasificación ya había logrado 4.04.252.
Con este registro, equivalente a correr en menos de dos horas la maratón o el kilómetro debajo de los 60 segundos o los 100 metros planos en menos de 10 segundos o los 100 metros en menos de 1 minuto en la piscina olímpica, Filippo Gannase pone en el camino de ser el primer terrícola en correr los 4.000 metros en menos de 4 minutos, lo que hace apenas 5 años o máximo diez, era una hazaña impensable y muy poco probable, pero hoy está claro que el avance del hombre en bicicleta no tiene límites, gracias a los progresos de la ciencia y la tecnología puestas al servicio del que pedalea.
Ganna consiguió en Marzo del presente año en Polonia, el título de campeón mundial de la especialidad con4.07.992 y se alista para defender su corona en el próximo mundial, además de aspirar al oro olímpico en Tokio y posteriormente- según sus propias palabras- va a intentar el récord de la hora, ya que igualmente en el ruta es un soberbio luchador contra el reloj.
Para conseguir la histórica marca, el espigado ciclista italiano corrió el primer kilómetro en 1 minuto 6 segundos (considerado muy lento y fuera de los parámetros para correr esta prueba), pasó el segundo en 1 minuto 0 segundos y 5 décimas. Luego en el tercero empleó 1 minuto 0 segundos 9 décimas y el ultimo lo corrió en un escalofriante tiempo de 58 segundos y 293 milésimas a una velocidad de 62 kilómetros por hora, rompiendo todas las previsiones y colocándose como el hombre capaz de derrotar cuartetas completas en el mundo que difícilmente pueden lograr este registro pues hasta hace poco tiempo, el 4.02 fue considerado récord mundial por equipos…!!!!
Y pensar, como anécdota para cerrar esta columna que Martín Emilio Cochise Rodríguez consiguió en 1971 el título de Campeón Panamericano en Cali con 4.45.38 (Pista de madera de 250 metros) y un mes más tarde el de Campeón Mundial en Varese (Pista de cemento 400 metros) con 4.53.98.
Queda claro entonces que la progresión del hombre y la mujer en el deporte seguirán su marcha incontenible y cobra vigencia la ya vieja frase que reza: Las marcas están para batirlas. Las del ciclismo seguirán cayendo porque hoy se corre más rápido que ayer en bicicleta pero más lento que mañana. O…no?