El experimentado
pedalista belga Philippe Gilbert se
refirió a la etapa diecisiete de la Vuelta
a España, como una jornada que quedará marcada en la historia del ciclismo
mundial. El corredor que afronta vigesimosegunda competencia de tres semanas,
afirmó que el ritmo al que se rodó durante todo el día fue extremadamente alto
y que esta fracción quedará en la retina de los aficionados.
Para el corredor del Deceuninck Quick Step, esta victoria tiene gran valor, ante lo difícil que resultó esta jornada. “Ésta es una victoria muy especial, 220 kilómetros a esta velocidad, no lo había vivido nunca en mi carrera. Ésta es una etapa para la historia por cómo competimos. Fue una locura desde el banderazo de salida. Nos escapamos 40 ciclistas, algunos de ellos hombres de la general como Quintana o Knox. Estábamos 7 de los 8 Deceuninck, y rodamos como locos”.
El vigente campeón de Paris Roubaix, manifestó que había buen ambiente en la fuga y que este
fue un escenario de gran emoción para los aficionados. “No cesábamos de darnos ánimos entre nosotros. Estoy seguro de que ha
sido precioso de ver. Conforme pasaron los kilómetros, perdimos algunos
elementos entre el viento, las subidas”.
El espigado
clasicómano belga, reveló la velocidad en la que alcanzaban a rodar y dijo que
la relación de cambios que llevaba, parecía no ser suficiente para mantener la
velocidad. “Íbamos rapidísimo, en
algunos momentos llegábamos a 75 km/h en el llano. Tenía metido el 54×11 y no
podía dejar de pedalear. En 17 años como profesional nunca había hecho una
locura como esta. El viento de costado y los abanicos forman parte del ADN
del equipo y yo también los adoro”.
Gilbert que
ya había triunfado en la etapa doce, agregó que aspira a volver a ganar en la
etapa del viernes. “No es la primera vez que gano dos etapas en la misma gran
vuelta, pero nunca he ganado tres. Así
que espero repetir en la etapa del viernes enToledo”.