Con gran intensidad especialmente en los últimos veinte kilómetros, se cumplió este domingo la segunda etapa de la Vuelta a España. Jornada en la que el colombiano Miguel Ángel López (Astana) cedió el liderato ante una maniobra excepcional de ataque, que le significó una espectacular victoria a Nairo Quintana(Movistar Team) y el liderato al irlandés Nicolas Roche (Team Sunweb) que ocupó el segundo lugar en esta fracción.
La distancia elegida por el “Estelar Cóndor” que hace soñar a la afición colombiana, para lanzar en enfurecido y definitivo ataque que le representó cruzar la meta en solitario y ascender a la segunda posición de la clasificación general, lo ejecutó a falta de tres kilómetros para la meta. El boyacense haciendo una plena demostración de experiencia y calidad, festejó por un estrecho margen en Calpe, sobre sus compañeros de aventura en los kilómetros finales.
La gran batalla entre los astros que esperan estar en la disputa del título general, se dio en el Piug de Llorenca, última dificultad montañosa del día, en la que hombres como Jakob Fuglsang (Astana) y Steven Kruijswijk (Jumbo Visma) perdieron contacto con el grupo principal en el que reinó la confusión y el gran descontrol.
Siete kilómetros más adelante, a falta de veinte para la meta un grupo de cinco hombres que aspiran a la victoria final se fueron en punta. Los colombianos Nairo Quintana (Movistar Team), Rigoberto Urán (EF Education First), junto al nuevo líder Nicolas Roche (Team Sunweb) y los grandes damnificados del día anterior Fabio Aru (UAE Team Emirates) y Primož Roglic (Jumbo Visma) sorprendieron a Miguel Ángel López (Astana) y se fueron al ataque, marcando una diferencia que con el paso de los kilómetros fue creciendo, hasta sumar 37 segundos en meta.
Al verse aislado de su equipo en los últimos diez kilómetros para la meta, el mismo Miguel Ángel López, tuvo que asumir la persecución sobre los cinco peligrosos hombres que aumentaron gradualmente su diferencia en esta sensacional segunda jornada de la Vuelta, que empezó a marcar para muchos, los destinos de la carrera y para otros enderezar un poco el camino, ante el terreno perdido en la contrarreloj como Roglic.
El grupo escapado del día que fue conectado en los últimos 30 kilómetros de carrera, estuvo conformado por; Sander Armée (Lotto-Soudal), Ángel Madrazo (Burgos-BH), Jonathan Lastra (Caja Rural-Seguros RGA) y Willie Smit (Katusha-Alpecin). Corredores que tuvieron una diferencia superior a los cinco minutos y se encargaron de poner gran emoción a esta segunda jornada, que no les dio opción a los fugados y los conectó antes del último puerto montañoso del día.
La tercera jornada de la ronda española, recorrerá 186 kilómetros desde su partida en la Ciudad del Juguete, hasta Alicante. Etapa que tendrá dos dificultades montañosas de tercera categoría que tiene un final en el que los velocistas tendrán su primera opción de buscar la victoria.