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Esteban Chaves sigue tercero en la general y líder de la montaña del Giro de Italia tras la 8ª etapa
Esteban Chaves (Mitchelton-Scott) siguió ocupando el tercer cajón del podio general y mantuvo el liderato de la montaña, maglia azurra, en el primer round del doblete montañoso del fin de semana. El bogotano entró séptimo en la jornada, justo por detrás de su compañero de equipo y maglia rosa, Simon Yates.
Esteban Chaves (Mitchelton-Scott) siguió ocupando el tercer cajón del podio general y mantuvo el liderato de la montaña, maglia azurra, en el primer round del doblete montañoso del fin de semana. El bogotano entró séptimo en la jornada, justo por detrás de su compañero de equipo y maglia rosa, Simon Yates.
Después de un día más fácil ayer para el sprint, la carga de trabajo aumentó hoy con Svein Tuft y Sam Bewley controlando la escapada antes de que Jack Haig y Roman Kreuziger protegieran a los líderes del equipo australiano en la escalada final.
Después de una lucha de 50 km, siete corredores se alejaron del pelotón para formar la escapada del día. El Mitchelton-SCOTT envió a Tuft y Bewley al frente del grupo y controlaron su ventaja a los cinco minutos, mientras que el maglia rosa se instaló más atrás en el grupo.
Cuando la carrera entró en los últimos 50 km el ritmo comenzó a aumentar, Yates, Chaves y sus compañeros de equipo se movieron al frente del pelotón y salieron del peligro detrás de Tuft y Bewley.
Habiendo estado activo mas temprano en el día, el Katusha una vez más fue al frente para acelerar el ritmo en el camino hacia la escalada final. A ellos se unió Groupama-FDJ y con 11 km para la meta la brecha se redujo a un minuto
La lluvia hizo su primera aparición en el Giro d’Italia 2018 para la escalada final y el Mitchelton-SCOTT volvió al frente para salir de problemas. A dos kilómetros del final, Richard Carapaz de Movistar atacó por la victoria. Detrás, los favoritos se vigilaron de cerca, sin poder hacer la diferencia.
«Queríamos estar al frente en la escalada. Sabíamos, debido a la lluvia en el final, que las rampas estarían muy resbaladizas. Queríamos llevarlos al frente y por eso montamos un ritmo parejo. Fue un comienzo muy difícil, así que tal vez la escapada no tuvo las piernas lo suficientemente buenas para mantenerse».
«Tal vez me hubiera gustado ganar algunos segundos de bonificación en la final, pero no pude salirme del cajón. La escalada no fue tan difícil. Hubiera sido casi imposible hacer una gran diferencia. Mañana es una escalada mucho más complicada. Tendremos que ver, si tengo piernas, lo intentaré” afirmó Yates.